La textura
Algo de teoría:
La textura es la cualidad visual y táctil de las superficies de todo lo que nos rodea. Puede ser de diferentes materiales y puede ser lisa, rugosa, áspera, suave...
Todo material posee en su superficie una textura propia que lo diferencia de otro. La textura puede ser apreciada a través del tacto o de la vista. Nuestras experiencias visuales nos permiten identificar los objetos por el conocimiento de la forma de la textura. (Lomelino, 2015)
Tipos:
Podemos crear tres grupos para clasificar los distintos tipos de texturas.
• Visuales y táctiles.
Las visuales son aquellas que nos hacen percibir a través del sentido óptico experiencias sensoriales mediante el uso de diversos materiales. Las táctiles, son aquellas que a pesar de contribuir también al aspecto visual, se reconocen por el tacto.
Ambas son muy útiles para el desarrollo de los niños generando en ellos experiencias únicas.
• Naturales y artificiales.
Las texturas naturales quedan delimitadas por aquellas que podemos encontrar dentro del mundo natural, como por ejemplo el tacto de una piedra, la suavidad de una hoja, la sensación de la arena entre tus manos…
Las texturas artificiales son aquellas que se han llevado a cabo a través de la mano del hombre, como pueden ser diversos materiales manufacturados como el tacto del cuero o una moqueta.
• Orgánicas y geométricas.
Este concepto es bastante más complejo para los niños, con lo cual, para este nivel educativo sería mejor contar con la explicación de las texturas visuales o táctiles y las naturales o artificiales.
Las texturas orgánicas son aquellas en las que la forma que se produce en ellas es natural o proviene de la naturaleza, esté o no esa textura manipulada por el hombre. Un ejemplo de estas texturas son las marcas de un jabón casero, o las betas producidas en el mármol.
Las texturas geométricas tienen la característica de ser geométricas como valga la redundancia. Suelen ser producto de texturas manufacturadas.